Soltar la culpa desde el sentir

Soltar la culpa desde el sentir

La culpa es una emoción que puede llegar a consumirnos internamente. Nos conecta con errores reales o imaginados, con juicios sobre lo que hicimos —o no hicimos—, y muchas veces se convierte en una forma silenciosa de auto-castigo. Pero, ¿y si en lugar de analizarla o resistirla, simplemente la permitimos estar?

Esta meditación está basada en el método de dejar ir, una práctica que nos invita a sentir completamente una emoción sin juicio, sin deseo de cambiarla o entenderla, sino simplemente a abrirnos a ella tal como es. Es en esa apertura —en ese permitir consciente— donde la emoción pierde su fuerza y empieza a disolverse.

Desde esta perspectiva, no necesitamos “arreglar” la culpa, sino acompañarla con presencia y rendición, dejando que su energía cumpla su ciclo y se libere naturalmente. Esto no significa negar lo vivido o evitar la responsabilidad, sino dejar de cargar con el peso innecesario del sufrimiento.

El budismo enseña que el sufrimiento surge del apego y la resistencia. En el Dhammapada, se dice:

“El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional.”

Cuando nos abrimos a sentir sin resistencias, estamos practicando el arte del soltar, del no aferramiento. Este acto de entrega es profundamente sanador.

Te invito a realizar esta meditación desde un lugar de amabilidad y apertura. No necesitas entender la culpa, solo permitirla, sentirla… y dejarla ir.

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